El Espíritu de la Navidad es una de las tradiciones navideñas que pertenece a los países nórdicos y que, desde hace algunos años, ha sido adoptada en muchos lugares latinoamericanos como parte de las costumbres características de esta época.
La leyenda, según el ángel Uriel, relata que el espíritu llegó al planeta proveniente de una galaxia lejana y se instaló en la región Norte, en lo que actualmente se conoce como la península escandinava.
El espíritu de la Navidad no es concebido como una persona de carne y hueso, a pesar de que la leyenda así lo describe, es más bien como una energía que viene desde del centro de nuestro sistema estelar y que llega cada año para repartir, más que cosas materiales, aquello de lo cual los seres humanos no pueden prescindir: paz, amor, armonía y alegría.
Quienes creen en la llegada del Espíritu de la Navidad celebran el 21 de diciembre, exactamente entre las 10:00 y las 12:00 de la noche, un ritual para recibirlo. El día anterior, las personas limpian la casa, con el fin de que no encuentre energías negativas y al día siguiente, luego de la cena, encienden velas y aromas de mandarina o limón.
Los deseos se escriben en orden de prioridad de mayor a menor y se recomienda pedir como prioridad el bienestar y la paz mundial hasta llegar a los deseos más personales. Posteriormente se cortan en tiras y se guardan hasta la visita del año siguiente para que se puedan quemar sólo aquellos que se cumplieron.
Fuente/globovision.com